25 semillas
Cultivar okra a partir de semillas es un proceso sencillo. Estos son los pasos que puede seguir:
Elija el momento adecuado para plantar: La okra es un cultivo de estación cálida y requiere una temperatura del suelo de al menos 65 °F (18 °C) para germinar. Por lo general, es mejor sembrar semillas directamente en el lecho del jardín después de que el suelo se haya calentado a fines de la primavera o principios del verano.
Prepare el suelo: las plantas de okra prefieren un suelo bien drenado que sea rico en materia orgánica. Antes de plantar, agregue compost o estiércol envejecido al suelo para mejorar su fertilidad y estructura.
Siembre las semillas: siembre las semillas directamente en la cama del jardín, plantándolas a una profundidad de aproximadamente 2,5 cm (1 pulgada) y separándolas entre 30 y 45 cm (12 a 18 pulgadas). Mantenga la tierra húmeda hasta que las semillas germinen, lo que suele tardar entre 7 y 14 días.
Adelgace las plántulas: Una vez que las plántulas hayan emergido y tengan una altura de 7,5 a 10 cm (3 a 4 pulgadas), adelgace para dejar un espacio de 30 a 45 cm (12 a 18 pulgadas) entre cada planta.
Riegue y fertilice: Mantenga la tierra constantemente húmeda durante la temporada de crecimiento y alimente las plantas con un fertilizante equilibrado cada 4 a 6 semanas.
Proporcione apoyo: las plantas de okra pueden crecer y pueden necesitar apoyo a medida que maduran. Puede usar estacas de jardín o un enrejado para mantener las plantas en posición vertical.
Cosecha la okra: Las vainas de okra están listas para cosechar cuando miden entre 2 y 3 pulgadas (5 a 7,5 cm) de largo y están firmes al tacto. Recoge las vainas cada 2 o 3 días para alentar a las plantas a producir más frutos. Use un cuchillo afilado o podadoras para cortar las vainas del tallo, teniendo cuidado de no dañar la planta.